Nosotros somo jugadores de woodsball. Somos la base del paintball. Más del 90% de los jugadores juegan paintball en el bosque y aún así el 90% de todos los medios que cubren paintball nos ignora. Nosotros no jugamos por premios o dinero o fama, pero por la pasión del juego. Jugamos porque ahí esta el reto; cada fin de semana, durante todo el año. Nada más tenemos que presentarnos y aceptarlo.
Nosotros no somos los niños bonitos del speedball. Somos los antiheroes del mainstream. No nos veran en posters o videos deslizandonos en bunkers con nombres como "cans" o "snakes", y estamos agusto con eso. El juego verdadero no esta abrillantado, acicalado y pulido o hecho para la TV. Es abajo y sucio, literalmente en las trincheras. Nuestros campos no son prados bien cuidados; es terreno que ambos equipos tienen que conquistar. No nos quejamos acerca de la arena y la mugre o de campos que son disparejos, es parte del mundo en el que jugamos. Raspones y abolladuras en en nuestro equipo son mostrados con orgullo, y podemos decir donde sucedieron y que tan hondo en el barro estabamos cuando los conseguimos.
Somos las raices del juego que han sido abandonadas por mucha de la industria principal. No hacemos a un lado de donde venimos para hacer el juego más disfrutable para la audiencia. Si nadie ve lo que hacemos no hace que el esfuerzo o su resultado valga menos. Manejamos por caminos secundarios a campos que nadie mas que nosotros conocemos. Sabemos que hemos llegado cuando perdemos nuestra estación de radio favorita y nuestros telefonos célulares ya no funcionan. Jugamos debajo del radar de los medios sin ninguna recompensa que los derechos de presumir porque queremos jugar. No hay premios, ni cheques de un millón de dolares, pero eso no hace que nuestra tenacidad para ganar sea menos fiera ni nuestros juegos menos importantes para nosotros.
Nuestro uniforme elegido es el camuflaje, no porque queramos ser militares si no porque funciona. Usamos nuestra ropa como una parte de nuestro juego, algo que elude a muchos "especialistas de tiroteos" que solo juegan juegos de cancha. La marcadora es solo una de las herramientas de un jugador bien preparado , no sú única herrmaietna. Sabemos esto; ya que usamos todas las habilidades y herramietnas que tenemos cada fin de semana.
Basandose solo en nuestra ropa, nuestro equipo y donde escogemos jugar, nos miran como jugadores inferiores. Nos han dicho que nunca tendriamos una oportunidad en un "juego verdadero" de paintball. Entendemos su juego de campo, y aún asi se rehusan a entender nuestro juego de bosque? No somos melancólicos de un juego hace mucho muerto. Sí, somo historia viva, pero hemos evolucionado. Honramos nuestras raices, pero no las abandonamos para seguir la siguiente "promesa" del paintball. Mucho despues de que el juego de moda en cancha se haya agotado, seguiremos jugando en el bosque. Conocer el pasado es controlar nuestro futuro, y abrazamos ambos.
Nos dicen que debemos de abandonar el bosque, por el bien del "futuro del juego". Nuestra presencia amenaza a aquellos que núnca han, y probablemente núnca entenderan, cuales son los origenes del paintball. Ellos creen que asustaremos a los medios por parecer "miembros de la milicia". No que las peleas a puñetazos y el hacer trampa descaradamente atraiga mejor atención de los medios hacia sus juegos. Ni que terminos como "Ingenieria de rebote" o "Tecnología de Rampeo" signifique algo a las verdaderas raices del paintball, o lo que debería de ser. Estan los jugadores de Arena asustados de nosotros o avergonzados porque les recordamos lo que deberían de ser?
Nosotros somos jugadores de woodsball. Cualquier fin de semana estaremos jugando nuestro juego apoyandonos en el pasado y un viendo nuestro futuro. Jugadores que no entienden van y vienen, esto lo sabemos. Ellos pueden jugar bajo luces brillanes y enfrente de audiencias y pretender ser estrellas de rock todo lo que quieran. Nosotros estaremos en el bosque muchos años despues de que se retiren, jugando el juego de paintball como siempre se ha jugado, con honor, con integridad y con amigos. El 90% de nosotros.